Poemas para recordar de Granada por Federico García Lorca
Quisieron los dioses que un 5 de junio del año 1898 viera la luz el poeta, dramaturgo y demiurgo de la palabra en lengua española, Federico García Lorca, pilar del imaginario cultural de la humanidad, y uno de los más más estudiados desde que fuera vilmente asesinado por el bando sublevado ó nacional al inicio de la Guerra Civil Española, que lo tildaba de socialista, masón y homosexual.
Nacido en Fuente Vaqueros, Andalucía. En 1909, cuando Federico tenía once años, toda la familia se estableció en la ciudad de Granada, aunque seguiría pasando los veranos en el campo, en Valderrubio, lugar insigne donde escribió gran parte de su obra.
Por eso, Granada es Lorca, y Lorca es Granada. La existencia hecha tierra, la tierra convertida en canto y la literatura plena de emociones, de vida. Aquí el bardo y sus paisajes volcados en cientos de páginas, que acompañan en el viaje por la obra de Lorca, por su tierra y por sus metáforas.
La poética lorquiana
La poética de Lorca representa el pináculo de la poesía de la llamada Generación del 27, pero, además, de toda la literatura española. Sus versos son el reflejo de un sentimiento trágico de la vida.
En esta poesía convergen la tradición popular y la vanguardia. Aunque no es fácil establecer épocas en la poética de Lorca, algunos críticos diferencian dos etapas: una de juventud y otra de plenitud.
En la primera se incluyen sus primeros escritos: Impresiones y paisajes (1918), escrito en prosa, a pesar de que muestra características del lenguaje poético, y Libro de poemas (1921), obra revestida de una gran influencia de Rubén Darío, Antonio Machado y Juan Ramón Jiménez. En esta época, García Lorca proyecta un amor triste y desesperanzado.
En su época de plenitud comienza con el Poema del cante jondo (1921) que, a través de la unidad temática, formal, conceptual y la expresión de los sentimientos, describe la lírica de la Generación del 27. El tema de la muerte y la incompatibilidad moral del mundo gitano con la sociedad burguesa son sus dos grandes tópicos.

Su obra poética está llena de símbolos tradicionales y vanguardistas. Entre ellos destacan:
- La Luna: Simboliza la muerte pero también el erotismo
- Los metales: Significa la muerte. Las navajas predicen la tragedia.
- El agua: indica la muerte, pero si el agua fluye significa vida.
- El caballo y el jinete: Es la muerte, pero también el erotismo masculino y fuerza.
- La sangre: simboliza vida y fecundidad.
- Las hierbas ó el color verde: tragedia y la muerte.
Lorca y Granada
Intuyendo que el país estaba al borde de un estallido bélico, Lorca decidió reunirse con su familia en Granada. Federico amaba proclamar que era granadino. Era un guía excepcional de su ciudad y, como hizo con tantos amigos, en la Puerta de las Granadas nos mostraría esa “Alhambra, jazmín de pena donde la luna reposa”.
En gran parte de su poemario hará referencias a su Granada natal. A continuación vamos a destacar sólo algunos ejemplos.
Granada
Quizás el poema que mejor describe Granada ciudad y sus alrededores, haciendo mención a lugares de gran interés como son la Calle Elvira, la Alhambra, la Catedral y los ríos Genil y Darro entre otros.
“Granada, calle Elvira donde viven las manolas,/ las que van a la Alhambra, las tres y las cuatro solas. / La catedral dejó bronces que la brisa toma;/ El Genil duerme a sus bueyes y el Darro a sus mariposas./” indicaría el poeta entre otros versos.

Elegía a Doña Juana La Loca
Más que un poema, se trata de un canto a la vida de Juana la Loca, cuyo celoso amor hacia su esposo Felipe y su temprana muerte la inhabilitó para ser reina de Castilla, permaneciendo encerrada durante años en su palacio de Tordesillas.
Una vez finalizada la Catedral de Granada, su hijo Carlos V trasladaría las tumbas de sus abuelos, los Reyes Católicos y las tumbas de sus padres , Doña Juana y Don Felipe, desde la Alhambra a la Capilla Real sita en el interior de la Catedral. De ahí las referencias a Granada, su tumba, la sierra, el río Darro en la elegía a Doña Juana La Loca : “Y Granada te guarda como santa reliquia/Oh princesa morena que duermes bajo el mármol!/Granada era tu lecho de muerte, Doña Juana/Los cipreses tus cirios/La sierra tu retablo/Un retablo de nieve que mitigue tus ansias/¡con el agua que pasa junto a tí!¡La del Darro!”, escribió el poeta.
Baladilla de los 3 ríos
El poema titulado “Baladilla de los tres ríos”, de 1931 representa una apertura geográfica y temática, con composiciones exultantes, eufóricas, junto a otras evocadoras de la infancia, a la que llamó “paraíso perdido”. Todo ello, ornamentado con un nítido enfoque de poesía popular romántica.
En esta baladilla compara el río Guadalquivir que pasa por Sevilla y Córdoba con los dos ríos, Darro y Genil, que cruzan Granada:
“El río Guadalquivir va entre naranjos y olivos. Los dos ríos de Granada bajan de la nieve al trigo./ El río Guadalquivir con las barbas granates./Los dos ríos de Granada uno llanto y otro sangre./ Guadalquivir, alta torre y viento en los naranjales/Darro y Genil, torrecillas/muertas sobre los estanques”, dirá Lorca en algunas de sus estrofas.
El Diván del Tamarit
La angustia amorosa que surge en “Diván del Tamarit” es lo que se llamó el “amor oscuro”. Diván, en árabe significa cancionero, es decir, un conjunto de poesías compuestas en dos bloques de poemas “las Gacelas” y “las Casidas”. Es un guiño al pasado histórico de Granada y de la Alhambra ya que este tipo de estrofas tienen un origen árabe. Tamarit era el nombre de una propiedad de la familia en Granada. Gran parte de los poemas fueron compuestos en esa localidad, mientras el orfebre de la palabra realizaba la lectura de poemas arábigo-andaluces.

Federico García Lorca logró reanudar el sentido auténtico de la tragedia, motivo por el cual es considerado como un Esquilo moderno. Lorca trasciende todas las fronteras, y su obra sigue vigente en todo el planeta, siendo el autor español del siglo XX más estudiado a nivel internacional.
Si desean saber más acerca de este increíble poeta, de su obra y de su vida durante su estancia en Granada, por favor,