Viajeras románticas del siglo XIX en Andalucía
De los lugares en el mundo que cuentan con mayor número de visitantes e historias de viajes, de aventura y misterio se encuentra España, sobre todo la región de Andalucía. George Barrow, Wasington Irving, Prosper Merimée, Ernest Heminway tan solo por nombrar algunos de los más insignes.
Sin embargo, en esta amplia lista también hay muchas mujeres quienes, aguerridas, valerosas, hoyaron con su presencia, muchas veces clandestina, el pintoresco y riesgoso sur de la Península.
De hecho, algunas debían pasar inadvertidas, ataviadas con ropas masculinas, e incluso iban armadas por si tenían que repeler algún ataque intempestivo de los bandoleros de la zona.
Pues sí, faltaban estos testimonios femeninos de las viajeras británicas, francesas, europeas y estadounidenses que vivieron la aventura andaluza, en su afán de poder ver con sus propios ojos cómo eran estos parajes descritos por los viajeros románticos e incluso algunas de ellas soñaban con ser interceptadas por algún bandolero, al disponer las viajeras una imagen romántica no sólo del paisaje sino también de sus personajes. Conoce la fascinante historia de algunas de las mujeres más representativas y osadas de esta época decimonónica.
Marie Bashkirtseff: esta joven ucraniana de nacimiento, pero que vivía en Francia, pasará mes y medio España, y doce días en Andalucía. Para el otoño de 1881 fue diagnosticada con tuberculosis. Sabía que no le quedaba tiempo y quería disfrutar al máximo sus últimos días. Visitó la cárcel antes que la Alhambra y allí pintó el retrato de un reo que tituló Antonio López, condenado a muerte por asesinato, octubre de 1881.
Noémi Cadiot: periodista, escritora y turista apresurada francófona. Fiel defensora de los temas de género quien, junto con la suiza Madame de Gasparin, estudiosa del mito arábigo-andaluz, también se integraron resueltamente a recorrer los caminos de Andalucía en un claro deseo de alteridad, esto es, de ser otro. Permanece en la región por espacio de 20 días y de ahí que escriba su obra con el nombre “Veinte días en España”
Condesa Juliette de Robersat: Bélgica vio nacer a la condesa Juliette de Robersat quien, en su periplo andaluz hace una descripción evocadora de su país de origen, específicamente en Cádiz. Allí advierte que, algunas calles “parecen terminar en un vacío, hasta el punto en que se diría que suben al cielo cuando dan al mar”.
En Cádiz conoció a Madame Fritz, una fotógrafa de paso por la ciudad en 1844, famosa por imponer la moda de los gabinetes fotográficos. El suyo estaba ubicado en la calle Comedias, en la Plaza del Cañón.
Madame de Brinckmann: Josephine de Brinckmann fue quizás la primera viajera gala que piso el territorio de la convulsionada y bélica España del siglo XIX. Entre los años 1849 y 1850 tuvo la oportunidad de recorrer gran parte del país. Es el paradigma de la mujer que se adentra en los Pirineos durante aquellos años. Para ella, el viaje, constituía en sí mismo una ciencia, más que un tiempo de ocio. Escribió Paseos por España.
Madame de Suberwick: se vestía como hombre para pasar desapercibida durante sus viajes. Arriba a España a mediados del siglo XIX y escribe su obra España pintoresca, artística y monumental. Costumbres, usos y trajes. Plantea un ejercicio literario del que también participaría el escritor Edgar Quinet o Manuel Galo de Cuendias, español liberal exiliado en Francia.
La marquesa de Léziart: prendada por el Puerto de Santa María, lo describió en su obra Impresiones de una solitaria en España, de 1878, tal vez con la mirada perdida en lontananza y una copa de vino en la mano: “Estoy enamorada del cielo del sur de Andalucía, de los horizontes que se descubren desde la ciudad del Puerto de Santa María…”.
Lady E. Mary Grosvenor: Marquesa de Westminster, viaja por primera vez a Málaga en 1840, visita la Iglesia de Santiago, el cementerio católico y, en su ruta hasta el convento de la Victoria, hace una parada en el cementerio inglés. Es una aventurera que se desplaza hasta la Península y las Baleares en yate, y se adentra en calesa a las ciudades junto a su esposo y criados, cargada de provisiones.
Lady Louisa Tenison: nacida en 1819 en el seno de una familia irlandesa de la aristocracia proinglesa, desafió en su momento al patriarcado artístico, cultural y científico imperante en la época.
Viajó a lugares remotos, sobre todo, anduvo por Andalucía, entre octubre de 1850 y la primavera de 1853, siendo Granada, Sevilla y Ronda sus principales lugares de culto. Sin embargo, su verdadero trajinar por el territorio andaluz se encuentra condensado en su obra Castilla y Andalucía, publicada en Londres, en 1853.
Si están interesados en realizar la ruta de los viajeros románticos, con hincapié en personajes femeninos, por favor .